El Proyecto Julio Verne: Investigación litoestratigráfica de la corteza primigenia de la tierra, en el Graben de San Felipe, Guanajuato (Primera parte)

Por: S. D. Bazán Perkins1 y S. Bazán Barrón2 

Las rocas expresan porque están ahí. Cuando no contestan, no les hablamos con el mismo lenguaje.

Resumen

Este proyecto de interés científico y geológico minero, se identifica hidrográficamente por el parte aguas continental que limita al norte el graben de San Felipe, donde nacen los arroyos temporales El Saucillo, Colorado, Carrizos, Los Arrastres, San Juan, Las Cruces, Coecillo, El Rincón, El Chacalote, El Tecolote, El Príncipe, que alimentan el cauce principal del Río de La Laja. Estos afluentes drenan en su conjunto al sureste, hacia Dolores Hidalgo, para finalmente alimentar la Presa de San Miguel de Allende, del sistema Lerma-Chapala-Santiago.  

Para esta interpretación, se parte que la Orogenia Oaxaqueña (1250-900 Ma)  involucra y afecta tectónicamente a los siete supergrupos que integran la corteza precámbrica de México, como son: Guanajuato (4,600-3,900 Ma), también al Zihuatanejo (3900-2600 Ma) ambos del Hadeano. Asimismo, afectó al Supergrupo Pápalo (3,800-2,600 Ma), correspondiente al Arqueano y al Supergrupo Zimatlán (2,600-1,800 Ma.) del Paleoproterozoico. Por consecuencia,  al Supergrupo Acatlán (1,800-1,000 Ma) que generó la secuencia oceánica del rifting tras arco insular del Supergrupo Telixtlahuaca (1,500-1,000 Ma) del Mesoproterozoico,  mediante subducción marina opuesta que implica una colisión y desarrollo para el arco del Subgrupo Vigallo, responsable del metamorfismo regional. Finaliza el Precámbrico con la intensa acreción comprensiva al poniente para implicar al Supergrupo Caborca (1,000-570 Ma) del Neoproterozoico y más tardío.

Por lo mismo, existe un metamorfismo regional decreciente en ambos lados, a partir del arco volcánico del subgrupo Vigallo con edad de 1,110±20 Ma, que define el  máximo paroxismo, que afecta a los referidos supergrupos preexistentes en facies de granulita, anfibolita, esquistos verdes, esquistos azules y filitas, reconocidos en variados afloramientos a lo largo y ancho del territorio de México, que determina el origen del metamorfismo regional.  

Al basal Grupo Los Alisos, le sobreyacen en discordancia tectónica y transicional paralela el Grupo San Juan de Otates del Arqueano. Este consiste de una potente sucesión vulcano sedimentaria metamorfoseada en facies de esquistos verdes del primigenio arco del Supergrupo Pápalo (3800-2600 Ma), de unos 10 km de espesor muy erosionado. Está representado por rocas félsicas en la base con pedernales ferruginosos de gran dureza (greenston belts), seguidas de andesitas, basaltos, picritas y rocas komatíticas, que alternan con cuarcitas,  metatobas, derrames con pillow lavas, compactos y amigdaloides, con textura spinifex, brechas, pizarras y grauvacas con espesores entre 2 a 12 m, para definir volcanes de explosión en medios marinos someros, a temperaturas entre 1600 a 1750° C, cuando la corteza tendría entre 8 a 10 km de espesor.

Tectónicamente, el área del proyecto, está cubierta por varios klippes de la nappa de La Carbonera, representada por el Grupo Tejalapan del Mesoproterozoico, del arco insular del Supergrupo Telixtlahuaca, Oaxaca. Toda la secuencia, está afectada por varias masas plutónicas de dioritas y tonalitas en stocks, debidas al pliegue de fondo durante el Paleozoico. Hacia el Mesozoico estuvo cubierta por sedimentos continentales de apertura oceánica, seguidos  por conglomerados, areniscas, pizarras, calizas bituminosas de cuenca y arrecifales de plataforma de las que quedan escasos vestigios. En consecuencia, durante el Paleógeno fue intensamente erosionada y afectada por el batolito de Comanja de Corona-Arperos, y desplazada al occidente la parte septentrional de la Sierra de Guanajuato, para quedar orientada en dirección SE45°NW, debido a los empujes de los bloques del escudo arqueano mexicano, desde el oriente. Los desplazamientos estructurales indican intensa actividad desde el Cretácico medio y durante la orogenia laramide, debido a los fuertes empujes alóctonos de los macizos arqueanos del bloque Chihuahua-Coahuila y de Burro-Picachos, hacia el poniente durante el Cretácico Superior y Terciario, que implica la Sierra de Parras E-W muy plegada. 

Por tanto, el desarrollo del proyecto trata de investigar el basamento de la corteza primigenia de la Tierra, hacia el Valle de San Felipe, Guanajuato, que constituye estructuralmente un graben del Oligoceno, entre los pilares de las sierras de Santa Bárbara y El Cubo. La secuencia precámbrica basal consiste de rocas metamórficas de origen sedimentario y volcánico, representadas por los potentes grupos Los Alisos y San Juan de Otates arqueanos,  los más antiguos identificados en México, con espesor de unos 20 km. A las anteriores, sobreyace en discordancia tectónica el arco volcánico del Supergrupo Telixtlahuaca del Mesoproterozoico. Dichas secuencias están afectadas por la intensa compresión hacia el poniente, que originó por fallas inversas el  plutonismo Pérmo-Carbonífero, del Paleozoico.

Seguidamente, la sucesión litológica aparece cubierta en discordancia tectónica por la Secuencia Ofiolítica Mesozoica, así como por rocas graníticas laramídicas, profundamente devastadas por la erosión. Su importancia económica, radica del emplazamiento durante el Oligoceno, de grandes vetas con depósitos hidrotermales de Oro y Plata del Distrito de Guanajuato y de otros distrito aledaños, movilizados y provenientes de la parte basal del  Supergrupo Acatlán del Mesoproterozoico. Finaliza la litoestratigrafía por un conjunto de rocas volcánicas y sedimentarias terciarias continentales, de variable espesor y muy erosionadas. Es importante señalar, que la parte basal  de toda la secuencia, está muy desgastada por la subducción del Supergrupo Acatlán hacia el oriente, durante el Mesoproterozoico por más de 450 Ma, que implica a la corteza primigenia de la Tierra.

En este sentido, el proyecto se enfoca a investigar la parte basal del Grupo Los Alisos, que representa la cima del Supergrupo Guanajuato, de la parte tardía del Hadeano  (4150-3900 Ma), con paragneises de cuarzo policristalino de alto grado a medio, decreciente al oriente, para cambiar gradualmente a areniscas, conglomerados, brechas, gravas, grauvacas interbandeados y de variable origen. Los paragneises exhiben estratificación cruzada de alta energía, depositados en aguas someras, con minerales detríticos refractarios, que varían al oriente del 97% al 35% de cristales de cuarzo, tridimita y cristobalita, mientras que se incrementan las arcillas, de silicatos de aluminio hidratados, las areniscas, grauvacas, gravas, brechas y conglomerados de 0.2 hasta 6 cm de diámetro.

En su conjunto, los paragneises definen extensos abanicos aluviales con vertiente al Surponiente, para graduar al oriente, en areniscas muy finas a medias de cuarzo de gran dureza y hasta gravas, brechas, conglomerados basales, en tonos negro, gris claro y rosa-amarillento, de ambiente litoral y fluvial de alta energía. Por lo mismo, el Grupo Los Alisos define una serie de abanicos aluviales que constituyen plataformas y cuñas clásticas primigenia transgresiva hacia el oriente con vertiente hidráulica hacia el occidente. Este modelo implica la primigenia apertura oceánica del Gran Rift de la Faja Estructural Cananeana del occidente de México, hacia los 4150 Ma de distribución global, para ocasionar los primitivos mares de la Tierra,  que dieron origen a la vida.

Las rocas detríticas, como areniscas, gravas, brecha y conglomerados basales del Grupo Los Alisos, comprende rocas volcánicas ultramáficas, máficas e intermedias, respectivamente de peridotitas, picritas, gabros, basálticas y andesíticas elongados, con escasos cantos granitoides de tonalitas, que alternan con bandas de grauvacas, arcillas de silicatos y aluminosilicatos de tonos blanquecino, que  provienen de la corteza primigenia de la Tierra,  objetivo del Proyecto Julio Verne. Los fragmentos de basaltos son porosos con amígdalas pequeñas, en tanto que las ultramáficas son compactas ligeramente foliadas y alteradas por oxidación, que implica también a las grauvacas que dejan oquedades planares por disolución o redondeadas de fragmentos, entre los paragneises de cuarzo de gran dureza.

Esta descripción litológica basal del Grupo Los Alisos, sería la primera sobre las características petrológicas de la corteza primigenia de la Tierra, basada en la propia sucesión estratigráfica directa, como aparece en el área de la Meseta de Cuatralba, para la Sierra de Guanajuato. Es decir, que los abanicos aluviales con materiales detríticos, derivan de las rocas erosionadas de la primitiva corteza del planeta, con edad de unos 4,550 Ma. También implican, la posibilidad de obtener edades isotópicas por U-Pb, para ese conjunto de rocas, que nos permita conocer el tiempo y origen de nuestro planeta, dentro del modelo estratigráfico, tectónico y metalogénico que se describe, para el Proyecto Julio Verne.

 Por tanto, se proyecta conocer la naturaleza de las rocas primigenias de la Tierra, que subyacen al Grupo Los Alisos con espesor de más de 6,000 m, en gran discordancia erosionada hacia su límite inferior. Es decir, que el objetivo consiste en identificar el contacto basal hacia el oriente, con la ejecución de obras mineras directas y sondeos con corona de diamante, así como túneles en espiral apoyados en los levantamientos geológicos y geofísicos de detalle. De esta forma, se intenta conocer e investigar el contacto inferior del Grupo Los Alisos que comprende una transición de areniscas, gravas y conglomerados inter digitados que cubre la cima de la corteza primigenia de la Tierra, representada por granite-greenstone o high-grade metamorphic associations. 

Se debe aclarar que los datos litológicos, se obtuvieron de bloques hasta de 2 m de diámetro, algunos plegados, arrastrados y depositados en el frente de aloctonía de la nappa de la Carbonera y observables en los arroyos de San Juan de Otates y San José de Otates, posiblemente a distancias de unos 10-16 km desde el oriente. Esto nos permite considerar que la corteza primigenia de la Tierra, pueda ser investigada e identificada con obras mineras hacia el oriente, dentro del Valle de San Felipe que define un graben estructural, entre pilares del Oligoceno-Mioceno.

Al respecto, consideramos que el Gran Rift tipo MORB de la FEC sufre una inflexión o quiebre estructural a partir de Arizona y en Butte, Montana, hacia el oriente, según consistentes datos estratigráficos, estructurales y metalogénicos. Estas referencias geológicas determinan una subducción lateral que dio origen a los arcos primigenios de los escudos arqueanos canadiense y mexicano, ahora dispuestos uno del otro en posición Norte-Sur, entre los 3800 y 2500 Ma. Aunque son abundantes las publicaciones que implican un supuesto impacto de un meteorito para los yacimientos de la región de Sudbury, Ontario, dejan más dudas que aciertos, sobre el origen de esos enormes depósitos de Cu, Ni, Pt, Co, Zn, Au, Ag, entre otros minerales más, para negar el supuesto impacto meteórico espacial. Es decir, que la estructura elíptica de Sudbury de 60 Km en dirección Noreste, por 28 km de ancho, forma parte del Gran Rift de la  FEC, para negar el impacto de un meteorito, tipo shock, hace 1850 Ma.

Esto es, que la reinterpretación de acreción para los límites del  Paleoproterozoico, reportan nuevos datos Aero magnéticos y geofísicos en la parte Norte Central de los EUA, que tienden a comprobar que la Faja Estructural Cananeana, se extiende hasta la magna estructura mineralizada de Sudbury, Ontario. Esto es, que el análisis de la estratigrafía, tectónica y metalogenia determinan que The Sudbury Structure Ontario, Canadá, comprende la prolongación de la FEC, conjuntamente con los depósitos de cobre nativo vulcanogénico de la Península Keweenan, de Michigan, emplazados en mantos, también por diques gábrico grenvillianos del Mesoproterozoico. Por tanto, la FEC continua hasta la Península de Labrador, a través de New Brunswick y Newfoundland, Canadá, Groenlandia, Norte de Escocia y hasta Finlandia, para determinar su origen y prolongación de aquella corteza primigenia.

Para comprender el alcance geológico del proyecto, fue necesario reconstruir la estratigrafía del Precámbrico y la evolución tectónica hasta el Fanerozoico, para interpretar la metalogénesis de las fajas estructurales en el tiempo y espacio. Esto implica que la sutura de desgarre de la Faja Neovolcánica Transmexicana (FNTM), del Pleistoceno ahora dispuesta NWW-SEE, debe su origen al disgregarse la Pangea al final del Paleozoico, para formar el Mar de Tethys, durante el Mesozoico. Entonces, se propiciaban grandes transgresiones marinas que invadían al centro-sureste, debido a los rifts jurásicos NNW-SSE, del Geosinclinal Mexicano y proto Golfo de México. Por tanto, se generaba una intensa devastación y desgaste por abrasión y erosión para destruir extensas plataformas marinas y litorales preexistentes, por cientos de kilómetros, incluyendo precámbricas, con bordes de abanicos marinos de verdaderos olistostromas, con gran pérdida de corteza por subducción marina convergente, desde el oriente.   

De la secuencia estratigráfica del Precámbrico basal descrita, se advierte que la propuesta del “terreno Oaxaquia” es un dislate y ocurrencia de sus autores sin fundamento estratigráfico alguno. También se desprende que en el territorio de México no se identifican geosinclinales del Paleozoico, debido a que desde la Orogenía Oaxaqueña la corteza de México se encuentra en proceso de acreción en contra de la FEC, para integrar la Pangaea del Pérmo Triasico. Es decir, que el Paleozoico del territorio de México comprende una franja anorogénica de plutones calcialcalino emplazados por pliegues de fondo y orientados NNE-SSW entre los 510 y 210 Ma que afectan a toda la secuencia precámbrica.

Entonces, el Mar de Tethys hacia el Cretácico Inferior, alcanzaba su máxima extensión con 3000 km, E-W, con desgaste del basamento precámbrico. El cierre del geosinclinal originaba calizas arrecifales del Cretácico Medio con levantamientos durante el Cretácico Superior, en anticlinorios orogénicos al oriente por subducción marina progresiva desde las trincheras de Chicontepec y Chilpancingo hacia el poniente. Estos eventos generaban masas batolíticas al occidente y gran vulcanismo en la Sierra Madre Occidental con removilización de sulfuros masivos precámbricos por plutonismo para constituir la Faja Estructural Mexicana laramídica. La gran compresión originaba la megashear de la FNTM para suturar el Mar de Thetys con depósitos flysch y molase, en la planicie costera del Golfo de México, hasta el Eoceno-Paleoceno continental de estilo germánico.   

Por tanto, establecemos que la FNTM está limitada al Norte y Sur por las secuencias precámbricas truncadas primigenias de la corteza, con rocas toleíticas, tipo MORB del Supergrupo Zihuatanejo de la Faja Estructural Cananeana al occidente, así como secuencias del Grupo Pápalo en Tehuitzingo, Puebla y la Sierra de Juárez. Asimismo, el límite septentrional de la FNTM comprende La Sierra de Guanajuato, con los potentes grupos basales Los Alisos, San Juan de Otates y El Charape. También las potentes secuencias del Gneis Huiznopala, y Macizo de Teziutlán del Arqueano. Se concluye que la Faja Neovolcánica Transmexicana hasta el Holoceno, constituye la sutura final del Mar de Tethys, limitada por las secuencias primigenias de la corteza de la Tierra. 

Hacia el Oligoceno y Mioceno, la corteza entre los 36 y 26 Ma, fue sometida a intensa compresión profunda desde del oriente, para movilizar los sulfuros masivos del subyacente Supergrupo Acatlán, del Mesoproterozoico, en subducción bajo la referida secuencia precámbrica. Este evento de compresión horizontal laramídico originó el emplazamiento de la extensa mineralización de Au, Ag, Pb, Zn, Cu, Hg del Distrito Minero de Guanajuato, así como de Guerrero, Estado de México, Hidalgo, Aguascalientes, Zacatecas, Durango y Chihuahua, del tipo cordillerano mesozoico, ahora en extensa explotación por Au, Ag, Pb, Zn, Sb, Hg y Cu, entre otros más, en el altiplano y la Meseta Central.

 Al mismo tiempo, se generaban fuerzas de tensión superficial con un extenso vulcanismo laramídico félsico, derivado del Grupo Los Alisos, para originar el depósito de las ignimbritas Chichíndaro-Cuatralba, del Oligoceno Medio. Estos piroclásticos cubre al sistema de pilares y grabens desde Villa de Reyes, SLP, hasta Querétaro, con  más del 75% de sanidino y cristales de topacio, asociados a vetillas pneumatolíticas de casiterita y hematita, con escaso tungsteno, debido a procesos de fluoritización, que provienen de la parte basal del Grupo Los Alisos y de la corteza primigenia, materia de investigación del Proyecto Julio Verne.

Concluimos que al identificar la secuencia completa de la corteza precámbrica en México, aunque muy erosionada y devastada, fue posible interpretar la evolución tectónica y metalogénesis, derivada de la estratigrafía. De suerte que, por primera vez, se identifican las provincias de las primeras concentraciones mineralógicas en los mares primitivos del Gran Rift de la Faja Estructural Cananeana, consistentes de importantes depósitos vulcano sedimentarias de sulfuros masivos de Fe, Cu, Zn, Co, Ni, Cr, Au, Ag, Pt, y otros, que por anatexis originan los porphyry copper deposits. En este sentido, el Tungsteno diseminado nos marca los bordes y las zonas falladas conglomeráticas del rifting, derivado de los granitoides generados en la corteza primigenia. Al mismo tiempo, el Molibdeno y Renio sedimentario precipitaban en salmueras de lagunas marginales por trampas o barreras litorales. Por tanto, el Estaño nos define los placeres acumulados en extensos valles fluviales inter montanos de aquella corteza primigenia, como se observan en Sudamérica.

La posibilidad del proyecto Julio Verne para alcanzar los objetivos litoestratigraficos basales del Grupo Los Alisos, en contacto con la corteza primitiva de la Tierra, se debe a que afloran rocas detríticas erosionadas cuando se originó el planeta. Están expuestas en la parte más alta que constituye la Meseta de Cuatralba, próxima al poblado Nuevo Valle de Moreno, de la Sierra de Guanajuato. La potente secuencia del Grupo Los Alisos,  primero fue levantada mediante el evento de subducción al oriente del Supergrupo Acatlán durante el Mesoproterozoico (1800-1000 Ma). Después, alcanza su posición actual por la subducción marina de la placa laramídica de la trinchera de Chicontepec-Vista  Hermosa hacia el poniente. Esto implica que la parte basal del Grupo Los Alisos en contacto con la corteza primigenia, se distribuya a lo largo del Graben de San Felipe, como un ramal meridional de la fosa tectónica del Graben de Villa de Reyes, San Luis Potosí, de la Mesa Central de México, para definir una extensa región por investigar en los términos expresados.

Palabras clave: Julio Verne, corteza primigenia, Grupo Los Alisos, Graben de San Felipe, metalogénesis.

Abstract

The rocks express why they are there. When they do not answer, we do not speak to them with the same language.

This project of scientific and geological mining interest, is identified hydrographically by the continental water part that limits to the north the graben of San Felipe, where the temporary streams: El Saucillo, Colorado, Carrizos, Los Arrastres, San Juan, Las Cruces, Coecillo, El Rincón, El Chacalote, El Tecolote, El Príncipe that feed the main channel of the La Laja River. These tributaries drain as a whole to the southeast, towards Dolores Hidalgo, to finally feed the San Miguel de Allende Dam, of the Lerma-Chapala-Santiago system.

For this interpretation, it is assumed that Orogenia Oaxaqueña (1250-900 Ma) involves and affects tectonically the seven supergroups that make up the precámbrica crust of Mexico, such as: Guanajuato (4,600-3,900 Ma), also to Zihuatanejo (3900-2600) Ma) both of Hadeano. Likewise, it affected the Pápalo Supergroup (3,800-2,600 Ma), corresponding to the Archean and the Zimatlán Supergroup (2,600-1,800 Ma.) of the Paleoproterozoic. As a consequence, the Acatlán Supergroup (1,800-1,000 Ma) that generated the oceanic rifting sequence of the insular arc of the Telixtlahuaca Supergroup (1,500-1,000 Ma) of the Mesoproterozoic, by means of opposite marine subduction that implies a collision and development for the Vigallo Subgroup, to be responsible for regional metamorphism. The Precambrian ends with the intense compression of accretion to the west, to involve the Caborca Supergroup (1,000-570 Ma) of the Neoproterozoic and later.

Therefore, there is a decreasing regional metamorphism on both sides, from the volcanic arc of the Vigallo subgroup with an age of 1,110 ± 20 Ma, which defines the maximum paroxysm, which affects the aforementioned preexisting supergroups in facies of granulite, amphibolite, schist green, blue schist and phyllite, recognized in various outcrops throughout the territory of Mexico, which determines the origin of regional metamorphism.

At the basal Los Alisos Group, the San Juan  de Otates Group of the  Archean, overlap in parallel tectonic and transitional discordance. This consists of a powerful sedimentary vulcano succession metamorphosed in green schist, shale facies of the original arch of the Pápalo Supergroup (3800-2600 Ma), about 10 km thick, very eroded. It is represented by felsic rocks at the base with ferruginous flints of great hardness (greenston belts), followed by andesites, basalts, picrites and komatitic rocks, alternating with quartzites, metatobas, spills with pillow lavas, compact and amigdaloid, with spinifex texture, gaps, slate and grauvacas with thicknesses between 2 to 12 m, to define volcanoes of explosion in shallow marine environments, at temperatures between 1600 to 1750° C, when the crust would be between 8 to 10 km thick.

Tectonically, the área of the project, is covered by several klippes of the nappa of La Carbonera, represented by the Tejalapan Group of the Mesoproterozoic, by the insular Arch of the Supergroup Telixtlahuaca, Oaxaca. The entire sequence is affected by several plutonic masses of diorites and tonalites in stocks, due to the bottom fold during the Paleozoic. Towards the Mesozoic it was covered by continental sediments of oceanic opening, followed by conglomerates, sandstones, slates, bituminous limestones of basin and platform reefs of which there are few vestiges. Consequently, during the Paleogene it was intensely eroded and affected by the Comanja de Corona-Arperos batholith, and the northern part of the Sierra de Guanajuato was displaced to the west, to be oriented SE45°NW, due to the thrusts of the blocks of the Mexican archaen shield, from the east. The structural displacements indicate intense activity from the middle Cretaceous and during the Laramide orogeny, due to the strong allochthonous thrusts of the archaen massifs of the Chihuahua-Coahuila and Burro-Picachos block, towards the west during the Upper Cretaceous and Tertiary, which implies the Sierra de Parras E-W very folded.

Therefore, the development of the project tries to investigate the basement of the primitive crust of the Earth, towards the Valley of San Felipe, Guanajuato, which is structurally an Oligocene graben, between the pillars of the Santa Bárbara and El Cubo mountain ranges. The basal Precambrian sequence consists of metamorphic rocks of sedimentary and volcanic origin, represented by the powerful Los Alisos and San Juan de Otates Archaen groups, the oldest identified in Mexico, with a thickness of about 20 km. To the previous ones, the volcanic arc of the Telixtlahuaca Supergroup del Mesoproterozoico overlays in tectonic discordance. These sequences are affected by the intense compression towards the west, which originated by inverse faults of the Permian-Carboniferous, of Paleozoic plutonism.

Next, the lithological sequence appears covered in tectonic discordance by the Mesozoic Ophiolitic Sequence, as well as by Laramidic granite rocks, deeply devastated by erosion. Its economic importance lies in the location during the Oligocene, of large veins with hydrothermal deposits of Gold and Silver from the District of Guanajuato and other neighboring districts, mobilized and coming from the basal part of the Acatlán Supergroup of the Mesoproterozoic. The lithostratigraphy ends with a set of volcanic and continental tertiary sedimentary rocks, of variable thickness and very eroded. It is important to point out that the basal part of the whole sequence is very worn by the subduction of the Acatlán Supergroup towards the east, during the Mesoproterozoic for more than 450 Ma, which implies the primitive crust of the Earth.

In this sense, the project is focused on investigating the basal part of the Los Alisos Group, which represents the summit of the Guanajuato Supergroup, of the late Hadeano (4150-3900 Ma), with high to medium polycrystalline quartz paragneisses, decreasing to the east, to gradually change to sandstones, conglomerates, breccias, gravels, interweaved grauvacas and of variable origin. The paragneisses exhibit high energy cross-stratification, deposited in shallow waters, with refractory detrital minerals, which vary from 97% to 35% of quartz, tridymite and cristobalite crystals eastwards, while the clays of hydrated aluminum silicates increase, the sandstones, grauvacas, gravels, gaps and conglomerates of 0.2 to 6 cm in diameter.

As a whole, the paragneisses define extensive alluvial fans with slope to the southwest, to graduate to the east, in very fine quartz sandstones of great hardness and even gravels, gaps, basal conglomerates, in shades of black, light gray and pink-yellowish, of high-energy coastal and fluvial environment. For this reason, the Los Alisos Group defines a series of alluvial fans that constitute transverse platforms and wedges originally transgressive to the east with a hydraulic slope to the west. This model implies the original oceanic opening of the Great Rift of the Faja Estructural Cananeana of western Mexico, towards the 4150 Ma of global distribution, to cause the primitive seas of the Earth, which gave rise to origin of life.

The detrital rocks, such as sandstones, gravels, breccia and basal conglomerates of the Los Alisos Group, comprise ultramafic, mafic and intermediate volcanic rocks, respectively of peridotites, picrites, gabros, basalts and elongated andesitic rocks, with scarce chants of tonalites granitoids, alternating with bands of grauvacas, silicate clays and whitish tones of aluminosilicates, which come from the primitive crust of the Earth, objective of the Jules Verne Project. The fragments of basalts are porous with small tonsils, while the ultramafics are compact, slightly foliated and altered by oxidation, which also involves grauvacas that leave planar hollows by dissolution or rounded fragments, among the quartz paragneises of great hardness.

This basal lithological description of the Los Alisos Group would be the first on the petrological characteristics of the primitive crust of the Earth, based on the direct stratigraphic succession, as it appears in the area of the Cuatralba Plateau, for the Sierra de Guanajuato. That is to say, that the alluvial fans with detrital materials, derive from the eroded rocks of the primitive crust of the planet, with age of about 4,550 Ma. They also imply, the possibility of obtaining isotopic ages by U-Pb, for that group of rocks, that allows us to know the time and origin of our planet, within the stratigraphic, tectonic and metallogenic model that is described, for the Jules Verne Project.

Therefore, it is expected to know the nature of the original rocks of the Earth, which underlie the Los Alisos Group with a thickness of more than 6,000 m, in great discordance eroded towards its lower limit. That is to say, the objective is to identify the basal contact towards the east, with the execution of direct mining works and diamond crown surveys, as well as spiral tunnels supported by detailed geological and geophysical surveys. In this way, we try to know and investigate the lower contact of the Los Alisos Group that includes a transition of interdigitated sandstones, gravels and conglomerates that cover the top of the Earth’s primitive crust, represented by granite-greenstone or high-grade metamorphic associations

It should be clarified that the lithological data were obtained from blocks up to 2 m in diameter, some folded, dragged and deposited on the front of the nappa of Carbonera and observed in the streams of San Juan de Otates and San José de Otates, possibly at distances of about 10-16 km from the east. This allows us to consider that the primitive crust of the Earth, can be investigated and identified with mining works towards the east, within the San Felipe Valley that defines a structural graben, between pillars of the Oligocene-Miocene.

In this regard, we consider that the Faja Estructural Cananeana,-type Large Rift undergoes a structural break or break from Arizona and in Butte, Montana, towards the east, according to consistent stratigraphic, structural and metallogenic data. These geological references determine a lateral subduction that gave rise to the original arches of the Canadian and Mexican archaen shields, now arranged one from the other in a North-South position, between 3800 and 2500 Ma. Although there are many publications that imply a supposed impact of a meteorite for the deposits of the region of Sudbury, Ontario, leave more questions than successes, about the origin of those enormous deposits of Cu, Ni, Pt, Co, Zn, Au, Ag, among other minerals, to deny the supposed meteoric space impact. That is to say, the elliptical structure of Sudbury of 60 km in the Northeast direction, by 28 km wide, is part of the FEC’s Great Rift, to deny the impact of a meteorite, shock type, 1850 Ma ago.

This is, that the reinterpretation of accretion for the Paleoproterozoic limits, report new magnetic and geophysical data in the North Central part of the USA, which tend to prove that the Faja Estructural Cananeana extends to the great mineralized structure of Sudbury, Ontario That is, the analysis of the stratigraphy, tectonics and metallogenic determine that The Sudbury Structure Ontario, Canada, includes the prolongation of the FEC, together with the native vulcanogenic copper deposits of the Keweenan Peninsula of Michigan, located in mantles, also by Grenvillian gabric dykes of the Mesoproterozoic. Therefore, the FEC continues to the Labrador Peninsula, through New Brunswick and Newfoundland, Canada, Greenland, North of Scotland and up to Finland, to determine its origin and extension of that primordial crust.

To understand the geological scope of the project, it was necessary to reconstruct the stratigraphy of the Precambrian and tectonic evolution up to the Fanerozoic, to interpret the metalogenesis of the structural strips in time and space. This implies that the tear suture of the originated the megashear of the Faja Neovolcánica Transmexicana (FNTM), of the Pleistocene now disposed NWW-SEE, owes its origin to the disintegration of the Pangea at the end of the Paleozoic, to form the Sea of Tethys, during the Mesozoic. Then, great marine transgressions were provoked that invaded to the center-southeast, due to Jurassic rifts NNW-SSE, of the Mexican Geosinclinal and proto Gulf of Mexico. Therefore, intense devastation and wear by abrasion and erosion was generated to destroy extensive pre-existing marine and coastal platforms, for hundreds of kilometers, including Precambrian, with borders of marine fans of true olystostroms, with great loss of crust by convergent marine subduction, from the east.

Of the sequence stratigraphic of the Precambrian basal described, it is noted that the proposal of “terrain Oaxaquia” is a dislate and occurrence of its authors without foundation stratigraphic any. It also appears that in the territory of Mexico do not identify geosinclinales of the Paleozoic, because since the Orogenía Oaxaca the crust of Mexico is in the process of accretion against the FEC, to integrate the Pangaea of the Permian-Triasico. That is to say, that the Paleozoic of the Territory of Mexico comprises a strip anorogénic of calci-alkaline plutons placed by folds of bottom and oriented NNE-SSW between 510 and 210 Ma that affect the whole Precambrian sequence.

Then, the Sea of Tethys towards the Lower Cretaceous, reached its maximum extension with 3000 km, E-W, with wear of the Precambrian basement. The closure of the geosyncline originated reef limestones of the Middle Cretaceous with uplifts during the Upper Cretaceous, in orogenic anticlinoriuos to the east by progressive marine subduction from the trenches of Chicontepec and Chilpancingo towards the west. These events generated batolithic masses to the west and great volcanism in the Sierra Madre Occidental with remobilization of massive Precambrian sulfides by plutonism to constitute the Laramide Faja Estructural Mexicana. The great compression originated the megashear of the Faja Neovolcánica Transmexicana (FNTM), to suture the Sea of Thetys with deposits flysch and molase, in the coastal plain of the Gulf of Mexico, until the Eocene-Palaeocene continental of Germanic style.

Therefore, we establish that the FNTM is limited to the North and South by the primordial truncated Precambrian sequences of the crust, with toleitic rocks, MORB type of the Zihuatanejo Supergroup of the Faja Estructural Cananeana to the West, as well as sequences of the Pápalo Supergroup in Tehuitzingo, Puebla and the Sierra de Juárez. Also, the northern limit of the FNTM includes the Sierra de Guanajuato, with the powerful basal groups Los Alisos, San Juan de Otates and El Charape. Also the powerful sequences of Gneis Huiznopala, and Macizo de Teziutlán of the Archean. It is concluded that the Faja Neovolcánica Transmexicana  until the Holocene, constitutes the final suture of the Tethys Sea, limited by the primitive sequences of the Earth’s crust.

Towards the Oligocene and Miocene, the crust between 36 and 26 Ma, was subjected to intense deep compression from the east, to mobilize the massive sulfides of the Acatlán Supergroup, of the Mesoproterozoic, in subduction under the aforementioned Precambrian sequence. This event of horizontal laramidic compression originated the location of the extensive mineralization of Au, Ag, Pb, Zn, Cu, Hg of the Mining District of Guanajuato, as well as Guerrero, Estado de Mexico, Hidalgo, Aguascalientes, Zacatecas, Durango and Chihuahua, of the mesozoic cordilleran range type, now in extensive exploitation by Au, Ag, Pb, Zn, Sb, Hg and Cu, among others, in the Altiplano and the Central Plateau.

At the same time, surface tension forces were generated with an extensive laramide felsic volcanism, derived from the Los Alisos Group, to originate the deposit of the Chichíndaro-Cuatralba ignimbrites of the Middle Oligocene. These pyroclastics cover the system of pillars and grabens from Villa de Reyes, SLP, to Querétaro, with more than 75% of sanidino and topaz crystals, associated with pneumatolitic veins of cassiterite and hematite, with little tungsten, due to fluoritization processes, that come from the basal part of the Los Alisos Group and from the primitive crust, research material of the Jules Verne Project.

We conclude that by identifying the complete sequence of the Precambrian crust in Mexico, although very eroded and devastated, it was possible to interpret the tectonic evolution and metallogenesis, derived from the stratigraphy. So, for the first time, the provinces of the first mineralogical concentrations are identified in the primitive seas of the Great Rift of the Faja Estructural Cananeana, consisting of important sedimentary vulcano deposits of massive sulfides of Fe, Cu, Zn, Co, Ni, Cr, Au, Ag, Pt, and others, which by anatexis originate the porphyry copper deposits. In this sense, the disseminated Tungsten marks us the edges and the conglomeratic failed zones of the rifting, derived from the granitoids generated in the primitive crust. At the same time, molybdenum and sedimentary rhenium precipitated in marginal lagoon brines by traps or littoral barriers. Therefore, the Tin defines us the placers accumulated in extensive inter montane fluvial valleys of that primordial crust, as seen in South-America. 

The possibility of the Jules Verne project to reach the basal lithostratigraphic objectives of the Los Alisos Group, in contact with the primitive crust of the Earth, is due to the emergence of eroded detrital rocks when the planet originated. They are exposed in the highest part of the Cuatralba Plateau, near the town of Nuevo Valle de Moreno, in the Sierra de Guanajuato. The powerful sequence of the Los Alisos Group was first raised by the subduction event east of the Acatlán Supergroup during the Mesoproterozoic (1800-1000 Ma). Later, it reaches its current position by the marine subduction of the laramide plate of the Chicontepec-Vista Hermosa trench towards the west. This implies that the basal part of the Los Alisos Group in contact with the primitive crust, is distributed along the Graben de San Felipe, as a southern branch of the Oligocene tectonic fossa of Graben de Villa de Reyes, San Luis Potosí, de la Mesa Central de México, to define an extensive region to be investigated in the terms expressed.

Keywords: Jules Verne, primitive crust, Los Alisos Group, San Felipe Graben, matallogenesis

Introducción

La secuencia basal primigenia de la Tierra por investigar, representa la corteza existente donde se generó la primitiva apertura y expansión marina del Gran Rift, tipo MORB del Supergrupo Zihuatanejo (3900-2500 Ma),  definido por Bazán y Bazán Perkins (2012-2014) y Bazán Perkins y Bazán (2014-2019)  en su área tipo de Zihuatanejo, Guerrero, para  constituir  la unidad litológica más antigua identificada en México. Consiste de una potente sucesión vulcano sedimentaria de unos 8 km de rocas máficas y ultramáficas con sulfuros masivos de origen bioquímico exhalativo, para los mares incipientes en la Faja Estructural Cananeana (FEC), que implican el origen de la vida asexual en nuestro planeta Tierra.  

Por lo mismo, el Grupo Los Alisos, comprende la primitiva cuña clástica y plataforma sedimentaria que representa la cima del Supergrupo Guanajuato (4600-3900 Ma), según estudios litoestratigráficos realizados por Bazán y Bazán-Perkins (2004-2006-2014) y Bazán-Perkins y Bazán (2011). Por tanto, el arco insular arqueano del Supergrupo Pápalo posterior, implica el desarrollo vulcano sedimentario calco-alcalino, ocasionado por subducción lateral hacia el oriente, desde la FEC mediante una placa marina primigenia global. Es decir, el Grupo Los Alisos comprende una cuña clástica sedimentaria y plataforma, sobre el que se generó el arco del Supergrupo Pápalo, ambos debido a la apertura oceánica y subducción lateral de la corteza, hacia el oriente, a partir del Gran Rift, tipo MORB, de la Faja Estructural Cananeana.

Podemos establecer que la primigenia corteza ocurrió entre los 4,550 y 4150 Ma, cuando se originaban después hacia los 4,150 Ma, las primeras marinas de apertura global del Gran Rift, tipo MORB, para formar la parte basal de la Faja Estructural Cananeana. La corteza primigenia de apertura oceánica, sería análoga a la expuesta en la Provincia Nain de Labrador y de Minnesota River Valley, así como en Godthaab y Amitsoq, West Greenland, según Goldich et al. (1961), Goldich (1973), McGregor, V. R. (1973), Goodwin (1968-1977) y Moorbath (1975-1979) entre otros más. Esa secuencia primigenia, subyace bajo los paragneises cuarcíferos de alto y medio grado metamórfico del Grupo Los Alisos para representar la cima del Supergrupo Guanajuato. Sobre el anterior, sobreyace en discordancia tectónica y gradual, la parte basal del Supergrupo Pápalo del escudo arqueano mexicano, así definido por Bazán  (1986-1987-1991-2004-2006) con edades que oscilan entre 3800-2600 Ma, en la localidad tipo del Arroyo de San Juan de Otates y en la Sierra de Juárez, Oaxaca.

Por consecuencia, el objetivo del proyecto Julio Verne se enfoca a identificar la corteza primigenia del basamento existente en el área del  Valle de San Felipe. Es decir, en el graben tectónico situado entre la Sierra de Santa Bárbara y la Sierra El Cubo, donde se infiere subyace la corteza primigenia de la Tierra, cuando se generaba la apertura oceánica del Gran Rift global, tipo MORB, de la Faja Estructural Cananeana, hacia los 4,150 Ma, para representar las primeras marinas donde se generaba el origen de la vida en nuestro planeta.

Mediante los reconocimientos geológicos de Zacatecas, San Luís Potosí,  Aguascalientes, Hidalgo y Querétaro, se determina que la región más favorable para identificar la corteza primigenia de la Tierra, lo constituyen los municipios de León y de San Felipe del estado de Guanajuato, justo al oriente del área de la meseta de Cuatralba. Nuevos datos geológicos,  infieren que  la corteza primigenia de la Tierra podría localizarse hacia el graben de San Felipe, como principal objetivo del Proyecto Julio Verne. La litología observada determina que el contacto inferior del Grupo Los Alisos comprende una transición de areniscas gruesas y conglomerados, gravas y brechas, interdigitados como abanicos aluviales y fluviales para cubrir la cima  de la corteza primigenia de la Tierra, representada por los llamados granite-greenstone o high-grade metamorphic associations, definidos así en varias publicaciones por Windley (1989) y Condie (1989).

Por lo tanto, el referido contacto basal constituye la materia de investigación del graben de San Felipe, Guanajuato y su prolongación estructural hacia los estados de San Luis Potosí, Zacatecas y Querétaro, donde se tienen xenolitos y fragmentos líticos precámbricos dispersos en varios volcanes de explosión Plio-Cuaternarios, reportados de la parte central de San Luis Potosí, por Aranda-Gómez et al. (1993). Aunque la mayor parte se trata de brechas líticas precámbricas de naturaleza alcalina y granitoides, la investigación se enfoca para las rocas ultramáficas toleíticas y granulitas, que puedan representar la naturaleza del manto y la corteza primigenia de la Tierra respectivamente, entre los 4600-3900 Ma, que subyace como basamento en los referidos grabens de esa región del altiplano de México.      

Estratigrafía del precámbrico de México

Para comprender la litoestratigrafía precámbrica de México, se describe la sucesión de la secuencia reconocida a lo largo y ancho de su territorio, comparada y correlacionada con la investigada en otros continentes. Sorprende saber que se distribuye en México toda la secuencia completa de la corteza precámbrica, aunque erosionada y devastada, sirve para reconstruir la evolución tectónica y metalogénesis, derivada de la estratigrafía. La sucesión de unidades litoestratigráficas de los supergrupos del Precámbrico, se definen por  discordancias globales con sus respectivos intervalos de su desarrollo y los límites de tiempo, expresado en millones de años, regidos por la International Stratigraphic Chart (2004- 2008) modificada, según la tabla anexa.

Evolucion de apertura oceanica  primigenia de la faja estructural cananeana, tipo morb, con subduccion oceanica al oriente,  para generar al supergrupo pápalo del arqueano

La primitiva corteza hacia los 4600 Ma, implicaba una nata heterogenia fracturada sin grandes cordilleras ni mares para segregar minerales, sino más bien estaban en iones y moléculas entre los cristales de feldespatos, micas y minerales ferro-magnesianos reciclados en un proceso continuo de migmatización, plutonismo y actividad volcánica. Por tanto, la  atmósfera terrestre de entonces,  sin agua ni oxígeno libre, estaba constituida principalmente por dióxido de carbono, nitrógeno, y en menor cantidad metano, amoníaco, dióxido de azufre, ácido clorhídrico y vapores complejos densos que se dispersaban por la elevada temperatura superficial  mayor de 200º. C. De tal forma, que hacia los 4150 Ma con las primera lluvias y el calor exhalativo de aquellos mares de los primitivos riftings, con actividad volcánica submarina toleítica, tipo MORB, se generaba el caldo de cultivo para las primeras bacterias procariotas y cianofíceas, con los nutrientes elementales necesarios de K, O, N, F, P, B, S, H, Cl para formar las primeras células unicelulares y asexuales del origen de la vida en la Tierra.

La atmósfera primigenia de aquel entonces era densa, según refiere Cloud (1968) cuando la gran actividad volcánica se excedía en compuestos de NH3, CH2, N, H2, CO2 y H2O; es decir, de amonio, metano, hidrógeno, dióxido de carbono en vapores densos y muy  reductora. Mientras tanto, aquellas intensas lluvias propiciaban corrientes hacia los primitivos mares con actividad volcánica submarina por la apertura oceánica del Gran Rift global, para originar el caldo de cultivo y las formas de las primitivas cianobacterias anoxígenas y procariotas, de las incipientes estructuras unicelulares de vida y asexuales en nuestro planeta.

Tales acontecimientos son similares a las dorsales de apertura oceánica desde el Arqueano al Pleistoceno. Distinguidos bioquímicos confirman y concluyen como Rutten, M. G. (1972), Schidlowski y Eichmann (1977), Schidlowski (2001), Corliss (1982), Schopf (1977), Siegel (1977), Muir et al.  (1977), Folsome (1977), Margulis (1977), Hoffman (1988) y Barghoorn (1966), que  formas orgánicas esferoidales, filamentos, arrecifes de estromatolitos, carbón isotópico, kerógenos, grafito y residuos celulares, ocurrieron en las primeras rocas sedimentarias marinas precámbricas. Esa actividad microbiana primitiva, se refleja con similares procesos en las dorsales de apertura del piso oceánico, a temperaturas entre 450º a 250º C. Bajo ese criterio de los citados bioquímicos Bazán-Perkins (1994) dentro de la secuencia precámbrica de la Faja Estructural Oaxaqueña, entre de los 3,800 a 1,000 Ma, identificó  la presencia residual de actividad micro-orgánica en el Arqueano y Proterozoico, en forma de thucholita, anthraxolita, hidro-carbón, grafito y kerógenos degradados, implicando acumulaciones de hidrocarburos en aguas marinas en varios intervalos de la corteza ancestral, relacionados con el origen de la vida.

La estratigrafía del Precámbrico que se construye, parte de un modelo propuesto por Bazán y Bazán-Perkins (2010-2012) que consiste en analizar los grandes cambios tectónicos y litológicos en la potente secuencia precámbrica reconocida en todos los continentes, correlacionada con las identificadas en México. Los cambios se definen por eones y eratemas separados por extensas y marcadas discordancias tectónicas globales. Las discordancias, se deben a profundos procesos de erosión, relacionados con la apertura oceánica de riftings, seguidos por subducción marina y la interacción de placas a la deriva en colisión, para las conspicuas orogenias reconocidas globalmente en todos los continentes.

Modelo de expansión oceánica del gran rift, tipo morb, de la faja estructural cananeana, con mineralización biogenica de sulfuros masivos vulcano sedimentarios, entre los 3900-2600 ma

A fin de simplificar este tópico, se establece que mediante los estudios estratigráficos y litológicos en México, no se identifican eventos de plutonismo con edades mayores a los 1800 Ma, que impliquen sistemas orogénicos previos para la secuencia del basamento precámbrico. Por consecuencia, en la corteza del territorio de México, se definen dos orogenias debidamente integradas en términos de los modelos de evolución tectónica expresados por Stille, H. (1936-1941), Kober (1942) y Kay, G. M (1947-1955) con todas sus fases. Ambas consisten, con movimiento de polaridad opuesta E-W, una de la otra: La Orogenia Oaxaqueña (1250-900 Ma) hacia el Oeste y la Orogenia Mexicana (180-13 Ma.) al Este, que implican para cada una ellas, la generación del rifting, desarrollo y evolución de todas las fases del ciclo sedimentario y tectónico. Asimismo, expresan las fases del eugeosinclinal y miogeosinclinal bien definidas, con sus extensas nappas finales de cabalgadura, siguiendo los modelos de Álvarez Jr. (1949-1959-1962) y Cserna (1960-1961) para el territorio de México.

Debido a varios reconocimientos geológicos regionales en Jalisco, Aguascalientes, San Luis Potosí, Hidalgo, Guanajuato y Querétaro por Bazán y Bazán Perkins (2004-2006-2008) identifican hacia la parte centro-occidental de la Sierra de Guanajuato una potente sucesión de rocas arqueanas, bien expuestas en esa unidad orogénica que se extiende por 80 kilómetros y 20 de ancho, orientada NW 45º SE.  Esta secuencia constituye un macizo aislado que forma parte del escudo arqueano mexicano, las que por su naturaleza y posición basal representan las unidades litoestratigráficas más antiguas identificadas en el territorio de México. Si bien, afloran en dos pequeñas ventanas de 10 Km2, se infiere que se extienden como basamento en varios bloques sólidos, de cuando menos  300 por 150 kilómetros de ancho, dentro de los mencionados estados.

Las secuencias primigenias afloran en ventanas socavados por arroyos que drenan la Sierra de Guanajuato y del área de Comanja de Corona, Jalisco, hacia la Región del Bajío, para exponer una discontinuidad estructural abrupta y regional entre la Faja Estructural Oaxaqueña, con las secuencias ofiolíticas del Supergrupo Acatlán del sistema cordillerano.  Dichas secuencias precámbricas, abarcan dos sucesiones litoestratigráficas del Arqueano y dos del Proterozoico Medio; afectadas o cubiertas por rocas del Paleozoico, Mesozoico y Cenozoico. Por lo mismo, aparecen acrecionadas y levantadas sucesivamente hasta su posición actual, por cuando menos seis eventos de subducción marina que dieron origen a cabalgaduras continentales inversas, desde el Arqueano al Plio-Cuaternario. Es decir, que las rocas más antiguas precámbricas aparecen en la cima, en los 2800 m sobre el nivel del mar, levantadas por eventos de subducción inversa del Mesozoico y del Cenozoico principalmente. 

La importancia del basamento de la Sierra de Guanajuato, se concreta en describir por primera vez cuatro unidades litoestratigráficas asignadas al Precámbrico, petrológicamente contrastantes que en su conjunto estaban asignadas al Cretácico Inferior, o al Mesozoico en numerosos trabajos de la literatura geológica de México. Por tanto, existen diferencias en tiempo de más de 3,000 Ma para las rocas basales reportadas en este trabajo. 

Hadeano.

Supergrupo Zihuatanejo (3900-2500 Ma)

El Supergrupo Zihuatanejo fue definido por Bazán y Bazán Perkins (2008-2010-2011-2012-2014) para la secuencia tipo MORB y parte basal cratonizada de la Faja Estructural Cananeana, generada durante la apertura oceánica del Gran Rift de la parte occidental de México. Su edad se asigna al Paleo-Arqueano, parte tardía del Hadeano, por su naturaleza toleítica y posición con los extensos afloramientos de rocas ultramáficas y máficas del Grupo Papanoa del área tipo de Zihuatanejo, Guerrero y del Grupo La Esmeralda del Estado de México. También se correlaciona con las rocas ultramáficas basales de la costa del Pacífico de Sinaloa y Sonora asignados al Grupo Mazatlán y de las islas Margarita y Magdalena, parte occidental y basal de las rocas ultramáficas de la Península de California,  estudiadas por Whalen y Passaggno (1984). Conjuntamente se asignan al Grupo Vizcaíno, tomado como referencia y área tipo, de la potente secuencia basal ultramáfica y peridotítica del área principal de la Península de Vizcaíno, Baja California Sur, entre otros afloramientos. 

Recientes estudios estratigráficos realizados por Bazán-Perkins y Bazán (2014) al Sureste de México, identifican al Supergrupo Zihuatanejo en Chiapas como unidad basal del Precámbrico de México, a lo largo de la carretera pavimentada que parte desde Hermenegildo Galeana al poblado de Huixtla y hasta Motozintla, en lo que estructuralmente se conoce Bloque Chortis, documentado por Carfantan (1977) del sureste de Chiapas, Guatemala, Honduras, Nicaragua de Centro-América. El área tipo del Supergrupo Zihuatanejo, comprende al Grupo Motozintla que aflora entre  3 a 12 km al poniente de Motozintla, para integrar una secuencia volcánica ultramáfica y máfica basal masiva y serpentinizada. La potente secuencia subyace en discordancia angular bajo los paragneises cuarzo-feldespáticos de hornblenda y biotita de color verde oscuro y blanquecino interbandeados del Grupo El Trapiche, parte basal del Supergrupo Zimatlán del Paleoproterozoico. Ambos supergrupos se presentan muy plegados, migmatizados y distorsionados, afectados por varios eventos de anatexis del plutonismo paleozoico, mesozoico y cenozoico.

El origen y edad se interpreta sobre bases estratigráficas, metalogénicas y edades geocronométricas globales, según un modelo de Bazán y Bazán Perkins (2014) hacia la parte tardía del Hadeano (4150-3900 Ma) a partir de la apertura oceánica del Gran Rift global, tipo MORB de unos 40,000 km de longitud y unos 2,000 km de ancho. Su apertura oceánica se relaciona por el desequilibrio del manto con la corteza, ocasionada por el bombardeo espacial de asteroides hacia la Tierra entre los 4300-3900 Ma. Esa acción acentuó la caída del níquel y hierro hacia el núcleo, para separar el manto y fraccionar la incipiente corteza con numerosas placas pequeñas en distensión, con grandes emisiones volcánicas, plutonismo y débil subducción, incrementada por fuerzas de convención continua y deriva continental, a través del tiempo  que prevalecen activas hasta el presente.

Las rocas ultramáficas y máficas de la FEC del Grupo Motozintla expuestas en Chiapas, representan la parte superior y posición que tenían en los estados de Jalisco, Colima y Michoacán hacia el Jurásico Inferior, antes del desplazamiento al NW del Cratón de Norte-América, a lo largo de la Trinchera de Acapulco. Por tanto, la parte basal no aflora y se desconoce su espesor de varios kilometros, para la FEC. En cambio, su límite estratigráfico superior se presenta muy erosionado, en marcada discordancia angular con El Grupo El Trapiche, parte basal de los paragneises del Supergrupo Zimatlán del Paleoproterozoico (2600-1800 Ma) para formar la margen occidental del geosinclinal de El Rosario, definido por Bazán y Bazán-Perkins (2004-2006), Así pues, podemos establecer que la FEC identificada en Chiapas y Guatemala representa la extensión en el subsuelo de importantes depósitos vulcano sedimentarios de sulfuros masivos de Fe, Cu, Zn, Co, Ni, Cr, Au, Ag, Pt, y otros, que por anatexis origina los porphyry copper deposits, como aparecen emplazados en varios bloques trasladados y rotados por las fallas transformes Polochic y Matahua, en las islas de la Placa Caribeña de Centro-América. 

Supergrupo Guanajuato (4550-3900 Ma)

Para estas notas se considera Supergrupo Guanajuato desde el contacto superior del Grupo Los Alisos de origen sedimentario, aflorante en el área tipo de la meseta de Cuatralba,  hasta la parte basal de la corteza primigenia de la Tierra como planeta, hace unos 4600 Ma. Este intervalo de tiempo y espacio representa a la corteza del Hadeano global. Aunque son  extensas y numerosas las provincias identificadas del basamento del Hadeano,  en su conjunto son  heterogéneas como las refieren Gastil (1960), Goldich et al. (1961), Wilson (1965), Goldich (1973), McGregor, V. R. (1973), Hoffman (1988) y Moorbath (1979) respectivamente para la región de Slave, Minnesota, Amitsoq, Nain y en Wyoming para el cratón de Norteamérica. Otros  extensos basamentos primitivos se reconocen en Groenlandia, Canadá, Finlandia, Ucrania, Rusia, China, Brasil, Sudáfrica y Australia Occidental, descritos en varias publicaciones de Windley (1989) y Condie (1989) como granite-greenstone o high-grade metamorphic associations, sin definir su base y con predominio de dioritas y tonalitas, asociadas a migmatitas, granulitas y gneises, de variado origen y espesor. Por tanto, la cima del Grupo Los Alisos, del área tipo de la meseta de Cuatralba, donde nace el Río San Juan de Otates, representa el límite superior del  referido Supergrupo Guanajuato, con espesor de más de 8 km. Por tanto, se infiere que bajo el Grupo Los Alisos subyace la corteza primigenia de la Tierra, objetivo principal del Proyecto Julio Verne. 

Es necesario mencionar que el área de investigación del proyecto Julio Verne ha sido estudiada por varios autores enfocados a la estratigrafía, petrología y sobre los yacimientos minerales de la Sierra de Guanajuato desde hace más de cuatro siglos, con motivo del descubrimiento de la famosa Veta Madre y  Vata de La Luz  por el arriero zacatecano Juan de Rayas en 1548. Entre los principales están los de Humboldt, Alexandre de (1811), Hill (1904), Flores, T. (2004), Edwards (1956), Gross (1975), Echegoyén-Sánchez (1978), Yañez Mondragón (1983), Vassallo et al. (1989), Vassallo y Martínez Pérez (1988), Ortíz Hernández et al. (1990), Ortiz-Hernández (2000),  Quintero-Legorreta, O. (1992),  Bazán y Bazán-Perkins (2004-2006) y Bazán Perkins y Bazán (2011), que sirven de base para la exposición de estas notas sobre la estratigrafía regional del Precámbrico de México.

Sección W-E del supergrupo pápalo del arqueano basal, seguido del supergrupo Zimatlán, del paleoproterozoico, en la localidad tipo de Etla-La Guacamaya, con la nappa laramide alvigo, hacia el oriente, en la sierra de Juárez, Oax.
Contacto litoestatigráfico entre el grupo El Trapiche basal y el Valdeflores del 
supergrupo Zimatlán del paleoproterozoico, en su localidad tipo de Cerro Gordo y 
Sierra de Vigallo, Oaxaca

Recientes reconocimientos del área de la Meseta de Cuatralba, identifican al oriente del Grupo Los Alisos cambios transicionales metamorfoseados de alto a medio grado, de areniscas gruesas, gravas, brechas y conglomerados muy elongados, de rocas peridotitas, basaltos y andesitas de color rosado, con escasos fragmentos de granitoides tonalíticos que aparecen interdigitados y dispersos en la sucesión basal. Estos cambios litológicos se incrementan más al oriente, en varios bloques arrastrados por la parte basal de la nappa de La Carbonera, del Grupo Tejalapan del Mesoproterozoico en dirección poniente, posiblemente desde una distancia de más de 15 km. Además, aparecen  bloques de paragneises del Grupo Los Alisos muy plegados, justo en el plano de decólement. Con estos nuevos datos, podemos considerar que la corteza primigenia de la Tierra podría localizarse más al oriente hacia el graben de San Felipe, que ahora constituye el principal objetivo del Proyecto Julio Verne. De esta forma, se interpreta que el contacto inferior del Grupo Los Alisos comprende una transición de areniscas, gravas y conglomerados interdigitados que cubre la cima de la corteza primigenia de la Tierra, representada por los granite-greenstone o high-grade metamorphic associations, propuestos en varias publicaciones por Windley (1989) y Condie (1989) respectivamente.

El contacto superior del Grupo Los Alisos del Supergrupo Guanajuato, aparece interdigitado y transicional con el Grupo San Juan de Otates, para representar la parte basal del Supergrupo Pápalo del Arqueano, donde se advierten cambios petrológicos progresivos. Por ejemplo, la cima el Grupo Los Alisos está constituido de paragneises laminados finos, con más del 95% de cuarzo, cristobalita y tridimita desarrollados en polimorfos, interbandeados con arcillas silicatos de aluminio y detríticos refractarios. Hacia el oriente, se incrementan los sedimentos arcillosos, aluminosilicatos, en forma progresiva, conjuntamente con areniscas, gravas, brechas y conglomerados, de tal forma que los fragmentos detríticos en los bloques arrastrados por la nappa, llegan a tener hasta el 50% y las arcillas de tono crema alcanzan el 30% de la roca. Estas variaciones litológicas permiten inferir que hacia el Graben de San Felipe, se pueda detectar girones, tegumentos o fragmentos de la corteza primigenia de la Tierra, mediante estudios geológicos y mapeos de detalle, con obras mineras y sondeos para reconocer la corteza primigenia de la Tierra. 

En su conjunto, los paragneises definen extensos abanicos aluviales con vertiente al Surponiente, para graduar al oriente, con areniscas muy finas a medias de cuarzo de gran dureza y hasta gravas, brechas, conglomerados basales, en tonos negro, gris claro y rosa-amarillento, de ambiente litoral y fluvial de alta energía. Por lo mismo, el Grupo Los Alisos define una serie de abanicos aluviales que constituyen plataformas y cuñas clásticas primigenia transgresiva hacia el oriente con vertiente hidráulica hacia el occidente. Este modelo implica la primigenia apertura oceánica del Gran Rift de la Faja Estructural Cananeana del occidente de México, hacia los 4150 Ma de distribución global, para ocasionar los primitivos mares de la Tierra,  que dieron origen a la vida. 

Las rocas detríticas, como areniscas, gravas, brecha y conglomerados basales del Grupo Los Alisos, comprende rocas volcánicas ultramáficas, máficas e intermedias, respectivamente de peridotitas, picritas, gabros, basálticas y andesíticas muy elongados, con escasos cantos granitoides de tonalitas, que alternan con bandas de grauvacas, arcillas de silicatos y aluminosilicatos de tonos blanquecino, que  provienen de la corteza primigenia de la Tierra, como objetivo del Proyecto Julio Verne. Los fragmentos de basaltos son porosos con amígdalas pequeñas, en tanto que las ultramáficas son compactas ligeramente foliadas y alteradas por oxidación, que implica también a las grauvacas que dejan oquedades planares por disolución o redondeadas de fragmentos, entre los paragneises de cuarzo de gran dureza. 

El Grupo Los Alisos es de gran importancia metalogénica, al constituir una plataforma primigenia con vertiente al Gran Rift fallado de la FEC, donde se inicia con paragneises crema-gris, finamente laminados con más de 97% de cuarzo, cristobalita y tridimita en polimorfos interbandeados con arcillas de silicatos, aluminosilicatos y detríticos refractarios. Al oriente, progresivamente se incrementan los silicatos de aluminio, conjuntamente con areniscas, conglomerados, gravas y brechas, de rocas ultramáficas, máficas, basaltos, andesítas afaníticas rosadas y escasos fragmentos de granitoides tonalíticos, que decrecen en intensidad metamórfica. Se considera que la litología expresada representa la corteza primigenia que se trata de identificar mediante el Proyecto Julio Verne, hacia el Valle de San Felipe.

Esta descripción litológica basal del Grupo Los Alisos, sería la primera sobre las características petrológicas de la corteza primigenia de la Tierra, basada en la propia sucesión estratigráfica directa, como aparece en el área de la Meseta de Cuatralba, para la Sierra de Guanajuato. Es decir, que los abanicos aluviales con materiales detríticos, derivan de las rocas erosionadas de la primitiva corteza del planeta, con edad de unos 4,550 Ma. También implican, la posibilidad de obtener edades isotópicas por U-Pb, para ese conjunto de rocas, que nos permita conocer el tiempo y origen de nuestra planeta, dentro del modelo estratigráfico, tectónico y metalogénico que se describe, dentro del Proyecto Julio Verne.

Para aquel tiempo de gran erosión, las intensas lluvias ácidas y corrientes de alta energía disolvieron los feldespatos y minerales ferromagnesianos para depositar Tungsteno en los bordes fallados del Gran Rift, así como Molibdeno y Renio sedimentario en lagunas marginales y extensos placeres de Estaño en los valles fluviales montañosos. El Estaño de origen pneumatolítico, que ahora aparece distribuido y explotable en vetas de ignimbritas y tobas de domos volcánicos del Oligoceno en los estados de San Luis Potosí y Guanajuato, nos indican que bajo esos depósitos continentales con espesores de 150 a 600 m, se encuentra la extensión de la corteza primigenia que se trata de identificar.

Así pues, la secuencia del Grupo Los Alisos corresponde a una cuña clástica primigenia, depositada a partir del Gran Rift de la Faja Estructural Cananeana para extenderse hacia el oriente, hasta desaparecer con espesores mínimos en Guanajuato y SLP. Entonces, hacia la zona costera del rifting, se depositaban conglomerados de tipo coluvial que disminuían en tamaño hacia los valles superiores para dar lugar a las areniscas, que implicaban depósitos finos de tungsteno (scheelita-wolframita), marginal y a lo largo del Gran Rift. El espesor de la secuencia del Grupo Los Alisos puede ser mayor de 6,000 m hacia su límite inferior, en discordancia transicional con la corteza primigenia de la Tierra, entonces de unos 8-10 km de espesor, representada por granite-greenstone o high-grade metamorphic associations.

La grata fortuna de contar con la secuencia completa de la corteza precámbrica en México, aunque erosionada y devastada, permite interpretar la evolución tectónica y metalogénesis, derivada de la estratigrafía. De esta forma por primera vez, se identifican las provincias zoneográficas de las primeras concentraciones mineralógicas para el Gran Rift de la Faja Estructural Cananeana, consistentes de importantes depósitos vulcano sedimentarios de sulfuros masivos de Fe, Cu, Zn, Co, Ni, Cr, Au, Ag, Pt, y otros, que por anatexis origina los porphyry copper deposits. En este sentido, el Tungsteno diseminado nos marca los bordes y las zonas falladas conglomeráticas del rifting, derivado de los granitoides generados en la corteza primigenia. Al mismo tiempo, el Molibdeno y Renio sedimentario precipitaban en salmueras de lagunas marginales por trampas o barreras litorales. Por tanto, el Estaño nos define los placeres acumulados en extensos valles fluviales inter montanos de aquella corteza.

Podemos establecer entonces, que la unidad sedimentaria más antigua del basamento está representada por el Grupo Los Alisos, del área tipo de la meseta de Cuatralba. La sucesión comprende unos 6000 m de paragneises de alto y medio grado metamórfico entre 95 a 30% de cuarzo, tridimita y cristobalita, como polimorfos inter laminados de gran dureza. Son de color crema, gris claro cristalino y blanquecino con estratificación cruzada y echado de 45º al SW, que definen los grandes flujos de corrientes hacia el occidente. La pobreza o carencia de feldespatos y minerales ferro-magnesianos se debe a que la entonces biosfera reductora, acontecía con lluvias y corrientes de agua extremadamente ácidas, para dejar residuos esencialmente cuarcíferos, con detritos refractarios y aluminosilicatos hidratados, arcillosos interbandeados de tonos crema y blanco. No obstante, las aguas llevaban disueltos gran cantidad de iones de toda la escala geoquímica, precipitados y concentrados después, en depresiones de diversos lagos reductores favorables como salmueras y hasta las zonas marinas, de los primitivos rifts tectónicos de la FEC, dispuestos al occidente. 

El principal objetivo litoestratigráfico consiste en identificar la roca madre o protolitos que dieron origen a los conglomerados, brechas, gravas y areniscas en los paragneises de cuarzos policristalinos del Grupo Los Alisos. Los fragmentos son poligénicos, producto de abanicos aluviales de la corteza primigenia, debido a la intensa erosión de rocas volcánicas máficas gris negro y andesitas porfídicas de color rosa, expuestos en la Meseta de Cuatralba, justo dende nace el Arroyo de San Juan de Otates. Varían en tamaño desde 0.2 hasta 8 cm y aparecen elongados por la presión metamórfica. Dentro de la descripción estratigráfica, tectónica y metalogénesis expuesta, es posible identificar en esa región algunos crestones de las referidas rocas volcánicas y granitoides metamorfoseadas del  basamento primitivo de la corteza. La región del proyecto aparece muy fallada en un sistema principal NNW-SSE y otro ortogonal posterior W-E y SW-NE laramídicos. Por tanto, se infiere que las rocas  arenosas, conglomeráticas, gravas y brechadas, de alto a medio grado metamórfico, cubran la corteza primigenia, del Supergrupo Guanajuato y como las más antiguas identificadas, de gran importancia estratigráfica global y para la geología de México.

Por tanto, el referido contacto basal del Grupo Los Alisos, constituye la principal materia  por investigar  del graben de San Felipe, Guanajuato y su prolongación estructural hacia los estados de San Luis Potosí, Zacatecas y Querétaro. Bajo ese contexto, resulta interesante investigar la edad de los xenolitos dispersos en varios volcanes de explosión Plio- Cuaternarios, de la parte central de San Luis Potosí, reportados por Aranda-Gómez et al. (1993). Aunque la litología de los volcanes de explosión, en su mayor parte se trata de piroclásticos y fragmentos de calizas cretácicas, que incluyen xenolitos de naturaleza alcalina, el objetivo se enfoca a los fragmentos líticos de rocas ultramáficas toleíticas y de las granulitas. Es decir, de los constituyentes originales de la corteza primigenia de la Tierra respectivamente, entre los 4600-3900 Ma, que se estima subyace como basamento en los grabens de esa región del altiplano de México.

Continuara

1 Industria Minera Indio, S. A. de C. V.
2 Industria Minera Indio, S. A. de C. V.